El origen de los anillos de compromiso

Los anillos de compromiso son esos objetos que simbolizan el aliarse con alguien de por vida, de ahí viene uno de sus sinónimos, alianzas. Es común que en su cara interior lleven grabados los nombres de los novios y la fecha de su unión. El intercambio de los anillos de compromiso es una de las tradiciones de boda más arraigada, sin embargo, la mayoría desconocemos su origen. Existen varias teorías que explican el origen de las alianzas de compromiso. Por un lado, los egipcios simbolizaban el amor mediante un círculo, ya que no tiene ni principio ni fin. Sin embargo, encontramos otro origen entre los romanos, que usaban los anillos para sellar cartas u otros documentos importantes, ya que en el anillo se encontraba su sello. Era como su firma de consentimiento. Y de ahí condujo a la entrega del anillo del hombre a la mujer, simbolizando su promesa de unión.

Por último, otra teoría del origen de las alianzas de compromiso, viene de la mano de los bárbaros, que usaban grilletes o argollas para capturar a las mujeres de otros pueblos y convertirlas en sus esposas. Aunque el anillo de compromiso fue evolucionando a lo largo de la historia y pasó de ser un simple aro de hierro a llevar diversas piedras preciosas, se cree que el primer anillo de compromiso con diamantes fue dado a Maria de Borgoña por el archiduque Maximiliano de Hamburgo en 1477, el más famoso conocido hoy en día. Como su matrimonio fue duradero el anillo se convirtió en un símbolo de fidelidad y amor, convirtiéndose en el anillo más codiciado en Europa. La reproducción de su anillo de compromiso se encuentra en el museo de Kunsthistorisches de Viena. Allí se exhibe el precioso anillo de diamantes dispuestos en forma de letra “M”, como las iniciales de los nombres de los contrayentes.